En la mañana de este viernes 13 de diciembre, se realizó la entrega oficial de los proyectos seleccionados para la Cuaresma de Fraternidad 2019, la cual estará enfocada durante 3 años a los hermanos migrantes.
Distintas parroquias, fundaciones y comunidades diocesanas hicieron sus postulaciones durante este año para los fondos de Cuaresma de Fraternidad y este viernes 13 de diciembre la Vicaría de Pastoral Social hizo entrega de los beneficios a los 37 proyectos seleccionados para ejecutar sus proyectos, esta ceremonia fue llevada a cabo en el edificio Cultural San Francisco de Talca.
Para dar la bienvenida el Administrador Apostólico de la diócesis, el padre Galo Fernández Villaseca, dirigió unas palabras a todos los presentes: “Que bueno que estemos aquí y que bueno que hayan manifestado interés de contribuir en esta realidad, en la cual la campaña de Cuaresma de Fraternidad se compromete (…) aquí se intenta poner en el centro de discusión realidades que hieren la convivencia, que hieren nuestro ser como país, lugares donde hay graves necesidades y dolorosas desigualdades”.
“La Iglesia ha promovido tantas campañas de servicio, en años anteriores fue dirigida a los adultos mayores y hoy día la Iglesia está poniendo otra realidad, que en este Chile no lo tiene tan consciente, todavía se mira al migrante como un estorbo, como un problema, como alguien que viene a disputar con nosotros nuestras posibilidades. Pero mirado desde la fe el migrante nunca es una amenaza, el migrante es un hermano en Cristo, hay algo tan hermoso que nos brota de la fe porque las nacionalidades no son para oponernos sino para destacar algo de la identidad originaria de nuestras raíces y, al contrario, lejos de oponernos estamos llamado a complementarnos y a enriquecernos”, agregó el obispo.
Para finalizar el padre Galo felicitó a todos por participar con sus proyectos en esta gran iniciativa, que busca ayudar en la situación compleja que llegan algunos hermanos migrantes y a orar por un mejor país donde la igualdad no sea solo una utopía.
“Fui forastero y me recibiste” (Mt. 25,35)
Seguidamente, el padre Luis Alarcón Escárate, Vicario de Pastoral Social, también se dirigió a los presentes resaltando la gran labor que como diócesis se realizó para conseguir los recursos en la campaña de Cuaresma de Fraternidad de este año, superando los 61 millones de pesos. Además, también informó que como parte de la Vicaría se ha ido consolidando también la Pastoral de Movilidad Humana (PMH), encargada de ayudar en diferentes procesos, ya sean formativos, legales, espirituales, a nuestros hermanos migrantes que se acerquen a la diócesis.
Culminada su intervención se procedió a la entrega de los 37 proyectos beneficiados de la Cuaresma de Fraternidad 2019. Entre estos proyectos tenemos el presentado por la iglesia La Matriz de Curicó, “Piececitos felices” de la mano de Carolina Morales Espinoza, el cual consiste en comprar zapatos de colegios a los hijos de migrantes, ya que es un gasto elevado en época de colegio y muchos de ellos no vienen con el calzado adecuado para todas las estaciones del año.
Otros de los beneficiados fue la parroquia San Bonifacio de Lontué, la cual se adjudicó tres proyectos este año, donde tres comunidades de esta parroquia quisieron brindar ayuda en cuanto a sustento y calefacción en la época de invierno a migrantes que sirven como mano de obra en el sector.
Así como ellos, muchos otros proyectos de formación, integración y ayuda social van a poder ejecutarse en los próximos meses gracias a esta campaña que se realizará con esta temática durante 3 años.
Ya para culminar, Joyce Araujo, encargada diocesana de la Pastoral de Movilidad Humana, felicitó a todos los beneficiados y agradeció el esfuerzo realizado por todas las parroquias y comunidades para brindar su ayuda tanto a la pastoral como a los migrantes que han ido llegando. Anunció también la adjudicación de un proyecto al Fondo Nacional de Cuaresma de Fraternidad para la PMH, lo que ayudará a concretar más proyectos dentro de la diócesis, e invitó a todos los presentes a contar con su apoyo, así como el de Jorge Abarzúa como coordinador de esta pastoral en Curicó, ante cualquier cosa que necesiten para seguir apoyando a los hermanos migrantes.
