Con un momento celebrativo y la misa central a las 15:00 horas del domingo 11 de octubre en el Santuario El Carmen, se dio fin a esta hermosa celebración, que se extendió más de una semana con la novena en honor a la Carmelita.
La celebración eucarística estuvo presidida por el Administrador Apostólico de la diócesis, el obispo Galo Fernández y concelebrada por los padres Osvaldo Navarrete y Rodrigo Arriagada, Vicario de Curicó y rector del Santuario. Este último fue el encargado de dar la bienvenida a todas las personas que estaban conectadas con la celebración a través de las redes sociales y de las señales de radio RTL y Canal 11 de Curicó.
Luego de las lecturas del día, realizadas por agentes pastorales por medio de la plataforma Zoom, nuestro pastor inició su homilía recordando que siempre pese a circunstancias difíciles que hemos vivido en años anteriores se ha podido celebrar esta fiesta a la Virgen del Carmen y este año no podía ser la excepción.
“Pese a las dificultades, pese a que no podamos acudir presencialmente, estamos celebrando a nuestra Madre, es cierto que es una mezcla de sentimientos encontrados, como decía el padre Rodrigo al inicio, por una parte un amor y una devoción gigante, pero al mismo tiempo con una tristeza, con una añoranza de poder estar presente físicamente. Tengo pocos años aquí y no he dejado de asombrarme año en año de la devoción, del amor de todo el pueblo de Curicó a esta fiesta con tanta tradición”.
Por otra parte, animó a todos los fieles que asistían en años anteriores a la misa y a la procesión a vivir este año la celebración con la invitación de fijarnos en lo que estrictamente importa a los ojos de Dios.
“No es lo multitudinario, lo que mira el Señor es el corazón y hoy día, desde ahí, desde donde está usted en su casa, la pregunta es cómo está el fuego del corazón, no es el sacrificio del cuerpo lo que mira el Señor, sino el ardor en el corazón que crece en el amor en la medida que es desafiada por las circunstancias. Y las limitaciones que asumimos y lo hacemos muy seriamente, son también una expresión de nuestro amor y respeto a todos”.
Ya para concluir, nuestro pastor mencionó el recorrido que hizo la imagen de la Virgen del Carmen, por diferentes sectores de Curicó, como una forma de encontrarse con sus hijos en este año donde debemos permanecer en casa.
“De algún modo, este mismo hecho de estar ahí en casa rezando, María está haciendo presente a su hijo Jesús. Sí, añoramos poder celebrar con todo el esplendor de la fiesta, pero el ardor del corazón es el que tiene que estar, eso es lo que mira el Señor, que arda nuestro corazón en amor a María Santísima y que ese amor nos llevo a su hijo, y además, nos enseñe a construir una patria de hermanos, una tierra fecunda en relaciones de amistad, de respeto y de alegría”.
La celebración continuó con la participación de los fieles que seguían conectados a través de Zoom y finalizó con la Oración por Chile a los pies de la imagen de la Virgen del Carmen y el agradecimiento a todos los que hicieron posible esta celebración, los agentes pastorales, los Anderos del Carmen, parroquias, colegios, grupos folclóricos, entre otros, por parte del obispo Galo Fernández y el padre Rodrigo Arriagada.