Con misa este jueves 21 de septiembre en el templo catedral de Talca, se celebró el aniversario número 15 de la pascua de Mons. Carlos González, quien fue obispo de nuestra diócesis por 30 años.
En presencia de amigos y conocidos de este pastor diocesano, se inició la Eucaristía a las 12:00 del mediodía, la que fue presidida por el obispo de la diócesis, el padre Galo Fernández.
Luego de las lecturas del día, Mons. Fernández expresó en su homilía que celebramos esta Eucaristía para dar gracias por la vida y ministerio de don Carlos González a 15 años de su partida, como siempre en la fiesta de San Mateo.
“En este contexto recordamos a don Carlos González, queremos dar gratitud por su vida entregada al servicio del Evangelio, por tantos años de pastoreo en esta diócesis, 30 años agitados años entre el 67 y el 97, tiempos de luchas ideológicas, de tensiones sociales, muy radicales. Tiempos marcados por el doloroso quiebre del orden democrático, el golpe militar y los años que lo siguieron, que marcan gran parte del tiempo de ministerio don Carlos, con graves crímenes de derechos humanos y tantos dolores que acompañaron”
“Le toca una participación destacada en el proceso de recuperación de la democracia con un rasgo que es muy propio de él: Su capacidad para acompañar a laicos católicos, animándolos a que ellos asuman el rol que les corresponde según las orientaciones de la Doctrina Social de la Iglesia”.
Así mismo, el padre Galo Fernández recordó varias cualidades y anécdotas de don Carlos González, en especial que “en el centro de la vida de don Carlos está Jesucristo y la Iglesia, y lo digo juntos porque él mismo comprendía que no se podía separar a Jesús de la Iglesia y que la Iglesia tenía que ser presencia de Jesucristo en el mundo”.
Para finalizar sus palabras, el obispo de Talca pidió rezar por don Carlos y “le pedimos también que él nos oriente en esta hora de la historia (…) es lo que estamos llamados nosotros, a vivir en las nuevas circunstancias de la historia que nos toca, buscar a Dios por sobre todas las cosas, entregar la vida por él, comprometernos con el mundo y especialmente con los descartados, los últimos, mostrar a Jesucristo en nuestra vida, en nuestro quehacer”.
Al concluir la Eucaristía se invitó a los presentes a visitar la cripta y realizar oración donde se encuentran los restos de don Carlos González Cruchaga.
De igual modo, se recordó a don Carlos con una Eucaristía en la iglesia La Merced de Curicó, presidida por el Vicario Zonal, el padre Rodrigo Arriagada.
