El miércoles 2 de julio, se celebró la misa de envío de ocho nuevos voluntarios que se unieron a la Pastoral de la Salud de la Diócesis de Talca, desde la capilla del Hospital Regional de la ciudad.
La Eucaristía inició a las 17:00 horas y fue presidida por el padre Carlos Campos, encargado de la Pastoral de la Salud. También asistieron algunas voluntarias de las Damas de Rojo, voluntarios antiguos, y familiares de los nuevos servidores de la salud.
Realizadas las lecturas del día, el sacerdote expresó en su homilía la alegría de recibir este regalo como pastoral.
“En el Salmo de este día repetíamos la antífona que decía ‘El Señor escucha al pobre que lo invoca’. Y podemos decir hoy día con mucha fuerza que esta palabra se cumple, porque el Señor nos ha escuchado, nos ha enviado para nuestra pastoral un grupo de servidores, de nuevos voluntarios, que vienen a colaborar y a servir aquí en medio del hospital, en medio de los enfermos. El Señor de alguna manera hace concreto el amor que nos tiene a todos nosotros, especialmente al pobre, al enfermo, al que vive una aflicción y que pide ayuda”.
“Estos hermanos que se van a presentar acá para ser enviados a este servicio, a esta misión en medio del hospital son la respuesta a esta invocación, a esta oración que a Dios se le ha hecho”.
Aseguró, que como Pastoral de la Salud se les acompañará a estos nuevos voluntarios en su integración, para que conozcan bien sus tareas y el servicio de acompañamiento a los enfermos.
Luego de la comunión, el padre Carlos Campos hizo pasar a adelante a los ocho nuevos voluntarios, para ser enviados en esta nueva responsabilidad que ellos aceptaron con mucho gusto y entusiasmo.
Así lo pudimos apreciar de Alicia Ávila, agente pastoral de la parroquia Los Doce Apóstoles y nueva voluntaria.
“Yo soy cursillista desde hace muchos años y además soy ministra de la comunión, así que tengo experiencia visitando enfermos para llevares la comunión, un servicio que hago junto a mi esposo y bueno eso me motivó, porque hay tanta gente que necesita la palabra y necesita compañía. Así que en una jornada me inscribí con ellos e hicimos un pequeño curso de formación general, fueron dos clases solamente y aquí estoy, agradecida”.
En ese sentido, María Cristina Arévalo, coordinadora de la Pastoral de la Salud, aseveró que fue un llamado bien recibido y que dio como fruto estos ocho nuevos voluntarios.
“Ellos se inscribieron y se les hizo una capacitación en la Universidad de Talca, donde se les explicó los cuidados que hay que tener al visitar a los enfermos, porque hay un protocolo y tenemos que cumplirlo, debemos usar mascarilla, delantal, guantes, depende también de la sala que vamos a visitar”.
“Y nosotros estamos contentos porque somos 20, incluyendo al padre y nos han llegado ocho personas nuevas que nos van a fortalecer porque no alcanzamos a dar abasto. Esperamos seguir aumentando nuestro número porque la idea es llegar a todas las salas posibles del hospital. En estos momentos estamos visitando el octavo piso, el sexto piso y como ahora ya tenemos un poco más de refuerzo vamos a visitar el séptimo piso, también estamos visitando diálisis y nos han pedido de otras unidades, pero no damos abasto”, agregó la coordinadora.